Conociendo a los artistas de julio

Lore es artista de la Compañía de la sede Olivos desde 2013. Practica teatro, teatro musical y danza, así que tiene una vida artística muy activa, incluso durante la pandemia, ya que hizo los talleres de Conectados, por Zoom. Su mamá Cristina nos contó cómo vive sus días fuera del arte.
“Cuando terminó el colegio en 2016 como no tuvo más actividad curricular y empezó a hacer alfombras de totora (orillos de tela de descarte de la industria textil) como un entretenimiento y para regalar a sus familiares en los cumpleaños. De a poco, le fue gustando la idea y comenzó a hacer para vender. Con la pandemia fue una actividad de gran apoyo porque tenía mucho tiempo libre y fue una forma de mantener el ingreso, ya que pudo sumar compradores gracias al boca en boca” , contó Cristina.
En 2021 retomó sus actividades en el centro de día donde iba antes (la convocaron como ex alumna) así que se reencontró con ex compañeros y con la felicidad de recuperar sus actividades. También fue una linda noticia y motivación para sus pares, cuando se enteraron de que Lore estaba generando sus propios ingresos con las alfombras, algo que había aprendido a hacer de chica.

Hoy conocemos a Victoria, artista de danza de la sede CABA. Por la dinámica familiar Vicky pasa sus días entre el clima tropical de Río de Janeiro, compartiendo experiencias con la comunidad hispana de Estados Unidos y sus amigos en Buenos Aires. Su papá vive en Brasil y ella fue muchas veces de vacaciones, pero, cuando su mamá viaja a EEUU por trabajo, ella pasa unos dos meses con su papá en Río. Y lo interesante es que viaja sola en avión: “acá mi mamá me lleva al aeropuerto, ahí un acompañante aéreo me lleva hasta el avión, me suben y viajo sola. Después, en el otro aeropuerto me reciben, me acompañan a hacer los trámites, buscar las valijas y me llevan hasta donde está mi papá esperándome”. Disfruta el clima de Brasil porque dice que a mitad de año no es ni caluroso ni frío y porque le gusta caminar por la playa escuchando música y cuando su papá trabaja, ella dibuja, pinta y está con el celu.

Julieta, en la cuarentena encontró en la cerámica una oportunidad laboral porque ya había tenido talleres en la escuela y, por eso, quiso volver a la actividad. “Durante la cuarentena empecé a hacer cerámica en mi casa, aprendí en varios talleres, me encanta hacer cerámica, siempre me gustó. Y me gusta vender en las ferias, atender al público”. La familia siempre tuvo la idea de proyectar un futuro donde Julieta se pudiera desarrollar con la cerámica, viéndolo como una posibilidad laboral. “Todo lo hacemos en familia, compramos materiales confeccionamos las piezas; nos fuimos acomodando en casa. También tomamos talleres on line juntas para aprender un poco más porque es un arte que tiene sus cosas específicas”, contó Lili, mamá de Juli. Tiene una página de Instagram @cer.juliriboldi donde publica las cosas que hace y la gente puede comprar macetas, platos, bowls y muchas más cosas.